lunes, mayo 19, 2008

FLUSH

VIRGINIA WOOLF

A través de la mirada canina

Virginia Woolf (1882-1941) siempre presentó en sus libros ese pequeño mundo exterior e interior de una mujer inteligente, quizá poco equilibrada, pero atenta siempre a la reseña de pormenores mínimos que ella vivió. Que ella era. Que ella contemplaba. Así, fue junto con Proust, Joyce y Kafka, la renovadora de una narrativa que sustituye el realismo tradicional por un impresionismo poético.

Quizá Las olas, Al faro, La señora Dalloway, o sus Diarios son textos más importantes que este Flush en la obra de Virginia Woolf. Aún así, Flush es un primoroso relato en el que la autora cuenta la vida de un perro cocker spaniel llamado Flush, perteneciente a la poetisa inglesa Elizabeth Barrett. Observando al animal transmite una semblanza biográfica de la protagonista, a la vez que traza un magistral cuadro de la sociedad británica en la época victoriana.

Flush no es el Truciolo de la burguesía media de Sándor Márai, ni el perro norteamericano, de dudosa raza y azarosa existencia, del Tombuctú de Paul Auster. Su simple descripción, en plena juventud, nos lleva ya, de improviso, al impresionismo poético anteriormente comentado: «Tenía ese matiz especial marrón oscuro que reluce al sol "como el oro". Sus ojos eran "unos ojos atónitos color avellana". Las largas orejas "le enmarcaban la cabeza como una capota, sus "piececitos" estaban "endoselados con mechones" y la cola era ancha».

La narración está llena de originalidad, y el buen estilo literario de la escritora inglesa queda patente en esta obra, plena de ternura y profundidad psicológica. Su prosa sobria, sencilla, ajena a toda estridencia, demuestra un elevado equilibrio lingüistico y un excelente dominio de la técnica narrativa, especialmente en la sucesión cronológica de los acontecimientos.

Virginia Woolf sabe, en su literatura, expresar sus ocultas —y no tanto— fobias, y sus goces refinados, las sutiles intuiciones de su alma femenina y los desasosiegos o decaimientos de su espíritu, proclive a las crisis nerviosas.

viernes, mayo 09, 2008

EL MARAVILLOSO VIAJE DE NILS HOLGERSSON A TRAVÉS DE SUECIA

SELMA LAGERLÖF

El maravilloso viaje de Nils Holgersson a través de Suecia fue escrito por encargo del Consejo de Educación sueco que, en 1901, pidió a la autora —primera mujer en recibir el Premio Nobel de Literatura en 1909— un texto para todas las escuelas, en el que se narrara la vida y la historia de Suecia, se explicará la geografía del país, y que además, despertara en el alumnado el amor por su patria. Muy pronto el texto de Lagerlöf se convirtió en un clásico de la literatura infantil, y en un clásico de la literatura universal.

Inspirado en los cuentos de animales de Rudyard Kipling, El maravilloso viaje de Nils Holgersson... narra las aventuras de un muchacho de catorce años de carácter egoista, que es hechizado por un duende que lo convierte en un niño de un palmo de altura. A lomos de un ganso blanco doméstico de su propiedad, que se une a una bandada de gansos grises salvajes en su migración anual al norte, como un nuevo Pulgarcito aventurero, Nils visitará Laponia y viajará a lo largo y a lo ancho de toda Suecia.

La novela, que va entrelazando aventuras y viejas leyendas populares, a través de lugares agrestes y misteriosos, conviviendo con toda especie de animales en plena naturaleza, incorpora un fuerte tono moral. Así, Nils comprenderá sus errores, aprenderá el valor de la solidaridad, y se sobrepondrá a su pereza y egocentrismo.

El efecto final está tan bien logrado, que cuando el literato japonés Kenzaburo Oe viajó a Estocolmo en 1994 para recibir el Premio Nobel de Literatura e invirtió su tiempo libre en recorrer el país, manifestó que, de niño, había leído muchas veces la novela de Lagerlöf y que todo era idéntico a las descripciones del libro.

Otro rendido admirador de El maravilloso viaje de Nils Holgersson... fue el filósofo Karl Popper, quien afirmaba que había leído y releído el libro al menos una vez al año durante toda su vida, y que lo fascinaba de tal modo que lo había impulsado a leer cada palabra escrita por Selma Lagerlöf a lo largo de toda su carrera.

Selma Lagerlöf (1858-1940) nació en Mårbacka, y fue maestra en una escuela de Landskrona hasta 1895. A partir de entonces se dedicó por entero a la literatura. Sus obras, basadas por lo general en historias y cuentos tradicionales suecos, se caracterizan por la naturalidad y la frescura del estilo. Sus personajes son personas sencillas, que contribuyen a que triunfe siempre el bien sobre el mal. Tiene otras novelas importantes como La leyenda de Gösta Berling, Lazos invisibles, Jerusalén, La casa de Liliecrona o la trilogía El anillo de los Löwenskölds. En 1914 fue elegida miembro de la Academia, lo que significó el reconocimiento a la singularidad de su estilo dentro del conjunto de la literatura sueca.

jueves, mayo 01, 2008

LA VENTANA SINIESTRA

RAYMOND CHANDLER

Marlowe: un perdedor ganador

Si a Raymond Chandler le hubieran dicho, convertido en ejecutivo de una empresa petrolífera tras su paso por el ejército canadiense para combatir en la Primera Guerra Mundial, que sería un prestigioso escritor de novelas policiacas, probablemente no lo hubiera creído. Y eso que asistió a la escuela pública de Dulwich, una de las mejores de Inglaterra, para abandonarla a los diecisiete años con profundos conocimientos de griego, latín, francés y alemán; y pronto publicó sus primeros poemas.

La boda con Pearl Eugenie Hurlburt, conocida como Cissy, dos veces divorciada y diceciocho años mayor que él, no evitó su despido en 1932 de su puesto ejecutivo, por sus continuas borracheras y sus escándalos con secretarias de la empresa. Fue entonces cuando se planteó seriamente su carrera de escritor.

Raymond Chandler creó un personaje: el detective privado Philip Marlowe. El héroe de sus novelas. Marlowe responde a un tipo muy a lo Bogart, en parte bohemio, en parte cínico, en parte sentimental y en parte oportunista. Aficionado al whisky y con un inconfundible sentido del humor, cuenta en primera persona sus casos.

Marlowe es la antítesis del héroe americano, es un perdedor nato, neurasténico y romántico bajo su corteza de duro, acosado y atacado tanto por las fuerzas de la ley como por las organizaciones criminales, y sólo a fuerza de tesón y perseverancia consigue resolver los problemas planteados. La situación de sus fricciones con la policía resulta clásica ya en las novelas del género.

La ventan siniestra es una joya de la novela policiaca. Raymond Chandler canibalizaba sus relatos breves, dándoles nueva forma en las novelas. Novelas típicas al gusto americano, de acción trepidante, en la que numerosos personajes aparecen interrelacionados de la forma menos previsible.

Raymond Chandler escribe con brusquedad estilística, sin apartarse un ápice de los rasgos propios del género detectivesco. Novelas de "género negro" cien por cien. Tramas acertadamente montadas, y una forma expresiva que utiliza un lenguaje naturalista propio del tosco argot de los bajos fondos. Además, la falta de aureola triunfal del detective Marlowe da más humanidad y realismo a la narración. Lo de menos en las historias de Raymond Chandler es la muerte. Importan las causas y las consecuencias.

La causa porque muestra una sociedad infame, donde el dinero y el poder corrompe. El deseo, la apariencia, tapa la podredumbre, el deshecho y los despojos de esa sociedad. Las consecuencias porque Marlowe, a pesar de que su vida no sea ejemplar, intenta, y logra en algunos casos, arrastrar al lado bueno a aquellos que lo desean.

A finales de 1954 murió Cissy, y Raymond Chandler ya alcoholizado, apenas intentó luchar contra su enfermedad. Murió en California en 1959. Había nacido en Chicago en 1888.